¿Cómo es posible que un niño de 3 o quizá 6 años se aburra en la escuela? ¿Cómo hemos podido llegar a esto? Si en el primer y segundo ciclo, es donde más se lo tendrían que pasar en grande... Estos niños son el claro ejemplo, unos niños que salen al recreo se ponen a jugar y se lamentan del sonido del timbre para entrar en clase. Esto debería ser impensable, si entrarán en clase y seguirán haciendo miles de cosas diferentes jugando y aprendiendo a la vez (o eso debería ser). Gracias a Dios que esto a mí no me pasó, porque lo veo demasiado triste, y en mis manos queda que mi futura clase no les pase porque es terrible. Creo que lo principal está en diversificar los aprendizajes, es decir, cambiar cada cierto tiempo, de actividad. Los cambios ayudan a iniciar el proceso de atención y así el niño podrá mantener la concentración por más tiempo y sin aburrirse.
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